La disputa por la exploración petrolera en territorios U'wa por parte de la OXY tuvo resonancia nacional e internacional gracias a la activa movilización de este pueblo indígena, cuyos líderes establecieron importantes conexiones con actores externos, todo lo cual le confirió carácter emblemático al conflicto con un balance que si bien puede considerarse exitoso para los U'wa, entraña desafíos dada la continuidad de la agenda minero-energética en las zonas que habitan y que reclaman como propias, esta vez por intermedio de otros actores como Ecopetrol.
Las estrategias de resistencia fueron variadas, desde la interposición de recursos legales, como lo fue la acción de tutela para amparar derechos fundamentales, entre esos el de la consulta previa que le asiste a los pueblos étnicos, al igual que la acción de nulidad en contra del acto administrativo que otorgó la primera licencia ambiental en 1995 (ver Rodríguez et al., 2010; Meléndez, 1995; El Tiempo, 1995a, 1996c, 1996d, 1997f, 1997g, 1997h, 1997i, 1997j, 1997k, 1997l, 2000q, 2000r, 2000s, 2000t, 2000u, 2000v, 2000w). Adicionalmente recurrieron a la jurisdicción internacional, como se observa con la demanda que el presidente del Cabildo Mayor U'wa interpuso ante la CIDH, en compañía de representantes de la ONIC y de la Coalición de Pueblos Amazónicos, con quienes expuso "la amenaza a que se ve sometida su comunidad por la intención de explotar petróleo en territorio sagrado para ellos" (El Tiempo, 1997o).
De igual modo, destaca la estrategia U'wa de incidencia internacional, con viajes a diferentes puntos del mundo en los que sus líderes expusieron argumentos en contra de la explotación petrolera, siendo esto determinante para decisiones como la que en su momento tomó el Gobierno Nacional de ampliar el área del Resguardo Unido en Boyacá y los Santanderes (agosto de 1999). En ellos han visibilizado el caso mediante "conferencias, ruedas de prensa y círculos de oración", "demandas, resoluciones presentadas por accionistas minoritarios, cartas, banners en internet, y desobediencia civil, [confrontando] a Occidental y sus mayores accionistas, incluyendo Fidelity Investments, al ex vicepresidente de EEUU Al Gore y Alliance Capital/Sanford Bernstein" (ver Meléndez, 1999a; El Tiempo, 2002a).
Estas luchas les ha significado el otorgamiento de premios internacionales como el Bartolomé de las Casas y el premio de medio ambiente Goldman, en España y EEUU respectivamente (ver Iragorri, 1998; El Tiempo, 1998a; Reuters, 1998), todo lo cual ha corrido paralelo al escenario de confrontación y movilización social en sus territorios, con concentraciones en inmediaciones de las áreas de interés para la perforación exploratoria, bloqueos a vías nacionales como la que comunica a las ciudades de Saravena (Arauca) y Pamplona (Norte de Santander), toma de edificios públicos y marchas en distintos puntos del bloque o del país, entre otras acciones (para más información, consulte la Figura 4 del documento de análisis).